3.1.4 Bahía Blanca: Polo Tecnológico Bahía Blanca

Al sudoeste de la provincia de Buenos Aires se encuentra uno de los principales puertos del país, responsable de gran parte de las exportaciones de granos y lanas del sur del país así como también de petróleo y derivados provenientes del norte de la Patagonia. La ciudad de Bahía Blanca cuenta con más de 300.000 habitantes y dos universidades atrayentes de jóvenes de la región que se radican allí para estudiar: la Universidad Nacional del Sur y la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Bahía Blanca. Económicamente hablando, la ciudad es el tercer nudo ferroviario más importante de la Argentina (después de la Ciudad de Buenos Aires y Rosario), accediendo a ella numerosos ramales que la conectan con gran parte de la región pampeana y el norte de la Patagonia, y el mayor centro petroquímico del país, con una participación del 87% en la producción provincial y del 64% a nivel nacional Municipalidad de Bahía Blanca. http://www.bahiablanca.gov.ar/ (acceso junio 2011)..


En el año 2004, impulsado por el gobierno municipal bahiense, se creó el Ente Promotor del Polo Tecnológico de Bahía Blanca, transformándose en agosto de 2006 en la Asociación Civil sin fines de lucro Polo Tecnológico Bahía Blanca (PTBB). Este Polo tiene la particularidad de agrupar como socios fundadores tres gremiales empresarias (Asamblea de de Pymes regional Bahía Blanca, la Unión Industrial Bahía Blanca y la Cámara de Informática del Sur), las dos universidades mencionadas, institutos científico tecnológicos, el Ente Zona Franca y el municipio local, permitiendo la libre adhesión de empresas que lo deseen. Comenzó concentrando su actividad en software y electrónica, aunque posee importantes expectativas para extenderse a otras áreas relevantes de la actividad económica y académica de la ciudad Federación Bonaerense de Parques Científicos y Tecnológicos. Op. cit., 24-25.. Según su web institucional, el objetivo del PTBB es impulsar el desarrollo y estimular el crecimiento regional, dinamizando y articulando la oferta y demanda tecnológica a través de la coordinación de acciones públicas, privadas, académicas y científicas para lograr la inserción de empresas locales y regionales en la economía nacional e internacional.

Es interesante que el caso bahiense se destaque por el particular impulso del gobierno local, que se encargó de proponer la creación de este polo convocando a los diferentes actores que se consideraron pertinentes y conformando dos comisiones de trabajo (una para aspectos formales y preparación de estatutos, la otra de perfil técnico para analizar la potencialidad de la industria del software) para hacer realidad esta idea. En contraste con muchas otras experiencias donde son los empresarios o las universidades las que proponen la conformación de estos polos de base tecnológica, es destacable la actitud del gobierno municipal de no solamente planteó el proyecto, sino que fue el principal impulsor y coordinador para que su real concreción.

Los beneficios ofrecidos actualmente a las empresas socias son diversos, pero uno de los principales es pertenecer a una organización que cuenta con gran difusión institucional en la región y facilita un importante networking con las empresas regionales, debido a que el apoyo público, gremial empresarial y universitario que recibe el PTBB hacen de esta institución un ente de gran reconocimiento. Por el lado de la difusión tecnológica se pueden destacar el acceso preferencial a seminarios de tecnología y las vinculaciones con los institutos universitarios para acceder a soluciones tecnológicas. Además, el PTBB representa un gran potencial para todas aquellas micro y pequeñas empresas informáticas locales que a través de su pertenencia a la organización pueden ofrecer sus servicios a grandes empresas instaladas en la región, en especial al dinámico sector petroquímico y las actividades logísticas vinculadas al puerto y las rutas hacia el territorio patagónico.


Para finalizar, en base a la investigación de L.J. Ramos (2010) el escenario del PTBB a 3 años de haberse constituido formalmente contaba con la participación de unas 9 empresas, un número relativamente escaso al compararse con los otros casos analizados previamente. Las firmas se encuentran divididas de la siguiente manera: 4 dedicadas al software, 3 al hardware y los servicios informáticos, 1 a la electrónica industrial y 1 a los recursos humanos IT, que emplean en total a 120 personas.

Por otro lado, al momento de hacer este trabajo la ciudad se veía embarcada en otro emprendimiento de gran relevancia consistente en la próxima creación de un Parque Científico-Tecnológico y Empresarial administrado por Tecnópolis del Sur, consorcio asociativo público-privado integrado por diferentes entes académicos, públicos y empresas. El objetivo de esta institución es convertir a Bahía Blanca en referente nacional en la industria de microelectrónica, y recientemente firmó un convenio con Tower Jazz Semiconductores, el quinto fabricante mundial de chips, para que esta compañía se radique en esta ciudad como lugar de desembarco en Sudamérica. Tecnópolis no es solamente un proyecto local aislado, sino que cuenta con el apoyo institucional y financiero de parte del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y el Ministerio de Industria, con fuertes incentivos fiscales y líneas de financiamiento específicos. En los próximos años se podrá observar la profundidad de esta iniciativa revolucionaria por los ambiciosos objetivos planteados y por la vanguardia tecnológica que representa la fabricación de chips por parte de importantes empresas transnacionales La Nueva Provincia. Importante logro de Tecnópolis del Sur (11/06/2011), y Quedó constituido Tecnópolis del Sur (21/08/10)..