Son emitidos al portador por organismos descentralizados, a través del ministerio de hacienda, con el objeto de cancelar sus pasivos o financiar sus proyectos. Tienen un vencimiento que va de 3 a 15 años, siendo el plazo de 7 a 10 años el más común. En general, los bonos de deuda pública tienen un período de gracia de 2 a 5 años, el capital tiene amortizaciones trimestrales, semestrales o al vencimiento. El rendimiento puede ser fijo o ajustable. Los intereses están exonerados del impuesto sobre la renta, y los mismos son pagados en forma trimestral, semestral o al vencimiento. Existen también los bonos de la deuda pública nacional emitidos por la nación, así como los bonos de la deuda pública municipal y estadal, los cuales son emitidos por las municipalidades y los estados, respectivamente, destinados a cancelar sus obligaciones.