Toda inversión tiene un riesgo asociado. Se define al riesgo como la probabilidad de que el rendimiento sea menor al esperado.
En general, las inversiones con mayor rendimiento esperado, tienen mayor riesgo asociado. Las inversiones que se consideran menos riesgosas son las letras del tesoro de Estados Unidos a corto plazo, dado que están respaldados por fondos del gobierno de Estados Unidos y se considera que tienen seguridad jurídica. Los bonos de países con una política fiscal mas volátil y con un historial de incumplimiento de pagos, tienen una mayor tasa de interés, dado que se considera que su riesgo es mayor.
El precio de las acciones suele tener una volatilidad mayor que el precio de los bonos. Los préstamos a empresas suelen tener un riesgo de default mayor que los préstamos al gobierno y los préstamos a individuos, suele tener un riesgo aún mayor en promedio.
En general, podemos decir que la tasa de interés está integrada por el costo del uso del dinero en el tiempo mas el riesgo de la inversión.
En el siguiente gráfico podemos ver la evolución de una inversión diversificada en acciones de la bolsa de Estados Unidos (Índice Dow Jones), y la evolución de un depósito de $1000 en un banco comercial de Estados Unidos.
La línea azul representa la inversión en acciones. Su volatilidad es relativamente mayor, al igual que su riesgo. Si hubiese invertido a comienzos de 2007 y hubiese vendido sus acciones a comienzos del 2009, hubiese perdido bastante dinero.
La línea verde representa la inversión en un depósito bancario. Esta inversión tiene un riesgo muy bajo (es Estados Unidos). Nunca tuvo rendimientos negativos.
Sin embargo, a largo plazo, el rendimiento de la cartera de acciones supera al rendimiento del depósito bancario. Esta relación se puede observar casi siempre que se toma un período de tiempo de varios años, en este caso, estamos hablando de 10 años.
El riesgo de una inversión se puede descomponer en varios tipos de riesgo, principalmente:
- Riesgo crediticio: asociado a la probabilidad que el prestamista no disponga de los fondos para cumplir con el acuerdo. Principalmente ocurre cuando una empresa o individuo tiene ingresos menores a los esperados. Por ejemplo, si una persona solicita un crédito personal y luego pierde su empleo.
- Riesgo de inflación: ocasionado porque el alza en la suba de los precios, hace que el rendimiento real disminuya. Por ejemplo, si la tasa de interés de un plazo fijo es del 10% y al momento de crear el plazo fijo la tasa de inflación es de 0%, al igual que la tasa esperada de inflación. Sin embargo, justo después de haber creado el plazo fijo la inflación aumenta al 15%, el rendimiento del plazo fijo, en términos reales, será negativo, porque luego de un año podremos comprar menos bienes con lo que se obtendrá el mismo.
- Riesgo de divisas: ocasionado por la volatilidad del tipo de cambio. Ocurre cuando se invierte en un activo nominado en una divisa extranjera que se deprecia.