La ley del valor

Enviado por Francisco Umpiérrez Sánchez fumsa@msn.com


Les recuerdo que Marx hablaba de que en el modo de producción capitalista predomina la irregularidad, aunque tras dicha irregularidad se impone de forma media y ciega la ley del valor. Esta circunstancia genera muchos perjuicios e injusticias a la sociedad. Se da ya un paso muy grande cuando se reconoce que en los fenómenos sociales hay leyes que lo regulan. Se da un paso aún mayor cuando se admite que el valor de las mercancías viene determinado por la cantidad de trabajo que le cuesta a la sociedad producirlas. Pero se da un paso definitivo en el camino de la justicia social cuando se decreta que nadie tiene derecho a apropiarse de trabajo ajeno. ¿Qué haremos en el caso de la persona que comentábamos antes, atendiendo al conocimiento de la ley del valor? Sin haber añadido ningún trabajo a su parcela, al cabo de 10 años la persona en cuestión se apropió de trabajo ajeno por un valor de 228.000 euros. Como es una apropiación indebida, pues dicha persona se apropia de un trabajo que ella no ha creado, el Estado debe actuar fiscalmente y apropiarse de toda la parte del precio que no le corresponde en propiedad. El Estado añadirá al precio originario la inflación acumulada al cabo de esos diez años, y éste será el precio neto que cobrará el propietario de la parcela por su venta. Como el valor extra que tiene esa parcela es un resultado social, la apropiación debe ser social y no individual. Para eso sirve el conocimiento de las leyes que rigen las relaciones económicas entre los hombres: para darle a cada cual lo que es suyo y hacer un mundo humano más justo y más feliz.

Francisco Umpiérrez Sánchez

Director del Centro de Estudios Karl Marx

En Las Palmas de Gran Canaria, 19 de enero de 2006.I